Por lo general, la aspiración de las líneas de producción de muebles, cocinas y cerrajería se realiza conectando las bocas de aspiración de las máquinas operadoras. La función principal del sistema de aspiración es «limpiar», en los paneles, los residuos provenientes del tratamiento de los mismos. Como consecuencia, todo nuestro sistema se dimensiona para respetar dicha exigencia.
Todo el contaminante aspirado se envía a un filtro de abatimiento autolimpiante de mangas (de poliéster antiestático con reticulado de acero inoxidable) que tiene ciertas características que garantizan los límites impuestos con respecto a las emisiones de polvos en la atmósfera.
Además, cuenta con una descarga automática del material purificado que luego se envía de forma neumática a un silo de almacenamiento o a contenedores de recolección.
Un cuadro eléctrico con PLC controla el sistema completo brindando datos de proceso y notificando eventuales emergencias.
Aclaramos que el polvo de madera es clasificado como potencialmente explosivo, como consecuencia, nuestra instalación respetará lo que solicita la norma en cuestión.