Los puestos de trabajo para las operaciones de arenado, granallado y desbaste manual están compuestos por cabinas semicerradas, fabricadas en base a las exigencias de trabajo, que pueden tener puertas de taponamiento y apertura neumática. Internamente poseen paredes aspirantes, con el objetivo de optimizar la aspiración y distribuir homogéneamente el flujo en toda la sección.
En cuanto a arenadoras/granalladoras automáticas es suficiente, en cambio, con crear una depresión directamente en la máquina operadora mediante una boca de aspiración.
El contaminante aspirado se envía, evaluando cada caso en particular, a un sistema de predecantación ciclónico denominado "de alto rendimiento", que es capaz de abatir también partículas finas, aumentando la duración de los filtros siguientes. La toma de entrada de los separadores ciclónicos, causa el considerable desgaste obtenido por el contacto entre contaminante y material, e fabrica de Hardox o similar. El autentico abatimiento se realiza por filtros de mangas/cartuchos que en el caso de las operaciones de desbarbado están propuestos con fieltros/tejidos que poseen las características particulares para este sector específico (mezcla de fibras y tratamientos superficiales).